Caminante,
vas andando paso a paso
entre puntas de un camino.
atravesando la huella
de esa cosa complicada
a la que llamamos vida.
Y no le encuentras sentido.
Vistes ropajes ajenos
durante todo el camino.


Caminante,
no comprendes
que todo tiene sentido.
Deberás subir montañas
para divisar el valle,
para ver brotar el río,
deberás pasar la noche,
para ver nacer el alba
que más oscura se vuelve
cuando ve acercarse el día.

Caminante,
no lo olvides.
Volverás, mas no sé como.
Te verás a cada paso.
en el árbol que se inclina
en la brisa del otoño
que parece detenida
al lado de cualquier fuego.
o en el rayo que sorprende
a quien se queda dormido.

O simplemente en el viento,
el deleite de un aroma
o en una espiga de trigo..