NO ME PREGUNTES NADA...(*)


Hoy regreso a tu lado
y en mis pupilas
se adivina el cansancio
de tantos días.

Yo sé que esperas
que regrese contigo
sin una pena.

Recíbeme en tus brazos
fuertes y leales,
que me amparen tus manos
como ellas saben.

Traigo una herida
que sangra desde el día
de mi partida.

Quiéreme como siempre
yo soy la de antes,
solo al vuelo me pesan
mis alas grandes.

Blancas y grandes
abatidas por vientos
y tempestades.

Te quiero. Y hoy he vuelto
a tus verdades.
Si me traiciona el llanto
son vanidades.
Bésame fuerte
no me preguntes nada
quiéreme siempre...


(*)SEGUIDILLA CON BORDÓN
(como “Nanas de la Cebolla”)