Hoy es un gran Día


-“Dios mío, estoy llorando el ser que vivo”

Aquella frase la había leído en un poema de Vallejo y calaba su alma con desesperación.

Las cosas le iban muy mal, la mujer que amaba lo había dejado y su trabajo no era más que una cruel rutina y encima con un sueldo muy bajo y en su mente se repetía: “Dios mío, estoy llorando el ser que vivo”

En las mañanas recibía las cuentas, debía mucho y lo estaban llamando de las empresas para recordarle que debía pagar ya o sería embargado.

Y en su mente se oía: Dios mío, estoy llorando el ser que vivo.

Un día se encontró un papel en la calle al levantarlo decía:
¡Hoy es un gran día!

Leyó tanto ese papelito que ya se decía esa frase de memoria todos los días.

Probó en un nuevo trabajo y lo aceptaron, consiguió una nueva chica que lo terminó al igual que la anterior pero está vez se repitió: Hoy es un gran día y encontró otra mujer que le gustó muchísimo más.

Hoy en día le va bastante bien,es el dueño de una empresa y ya se casó y se sigue repitiendo en su mente: ¡Hoy es un gran día!