| ANHELOS
 Quisiera tener el mar de confidente
 para que fuera dócil a mis caprichos,
 porque sé que tus ojos misteriosos viven
 en sus profundidades.
 .Quisiera ser río, río generoso
 para someterlo a mis imperiosos enfados,
 porque el río al igual que tus ojos,
 sueñan en silencio y yo quisiera
 penetrar en ellos como ladrón
 a la espera de que me dejes entrar.
 .Quizás la montaña sea más generosa,
 menos extraña, más complaciente,
 ella me permita que pueda
 verme en tus ojos negros
 como la profundidad del mar,
 ojos con los que sueño.
 .Por debajo de los árboles,
 no existe pena que inquiete mis pensamientos,
 y por encima de ellos, la luna, el sol,
 debajo de ellos el río, las piedras.
 .En mi sólo existe tranquilidad y paz,
 nada me importa sino la comunión
 de mis pensamientos,
 con el bien y la gloria;
 no quiero perderme en el mal,
 deseo seguir siendo pura
 en mis sentimientos.
 .Bajo el follaje vibrante y sombrío,
 sueño con un hilo de oro de la luna
 sobre el diáfano silencio,
 el susurro del río y el lamento del viento
 que siempre me acompaña en mi soledad.
 .Anhelo que mi amor sea como un águila
 para salvar el cielo sin tener escala,
 porque mi amor tiene dos alas
 para volar contigo al azul infinito
 porque todavía tengo juventud para los dos.
 
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