Ambos estamos cansados. Cansados del tiempo, de la prisa, de las sombras, de correr ocultos a un simple cuarto de hotel de tercera, a terminar lo que comenzamos con sólo mirarnos. Exaustos sobre la cama, yo pienso sobre el amor. "EL AMOR", ¿acaso es esta fantasía intentada y disfrazada de encuentros furtivos?. Él me observa y pienso que no soy nada en su vida y a la vez que lo soy todo. Él me observa y siento ganas de seguirlo amando, pero no puedo. No puedo amar aun hombre casado que no dejará a su esposa por mí, por esta simple muchacha que sólo busca su abrazo, su beso, sus caricias, su modo de mirarme. Si él me ama, nunca me lo dirá.
Y yo talves lo seguiré amando en profundo secreto, aunque me sienta usada, aunque me sienta amada por sólo unos minutos, por unas horas. Él se levanta. Comienza a vestirse. siempre me prometo que será la última vez. Los últimos momentos, las últimas tristezas.
Pero simpre vuelvo a caer, por él, por mí, por la soledad..., nosé. Quiero pensar que es por amor, pero, ¿será tan triste el amor?