Un día 25 de agosto, el año, eso no importa
eras frágil, jamás podré saber si vieron algo tus ojos aquel día
Lo que si se, es que venías con el sentido del tacto en extremo desarrollado
Me tomaste y te aferraste a mí, como pidiendo no separarnos nunca
Te espere por interminables meses, fue una espera excitante y agotadora
Llegaste a llenar el inmenso vacío de mi alma
Me ayudaste a terminar de purgar mis pecados.
Necesite de ti del primer día que supe que existías
Fuiste mi segundo gran premio dado por la naturaleza
Soy honesta, quizá no lo merecía
O quizá llegaste a enseñarme el más grande de los amores
Que puede animal alguno sentir.
¿Qué diferencia puede existir entre un animal pariendo
Acicalando a su cría, limpiándolo y alimentándolo, ¿no es eso amor?
¿No es acaso lo mismo que nosotros los llamados superiores hacemos?
Cuantas cosas he aprendido de ti mi pequeña y cuantas más quedan por aprender
Fuiste creciendo como la mala hierba
Me has enseñado a reír a carcajadas y también conocer el enojo
Eres el motor de mi vida, por quien respiro día a día
Como explicarte que necesito de tu fuerza para continuar
Que si tú decaes me es imposible continuar
Siento las veces que te he fallado y no te he escuchado
Siento las veces que me he olvidado por qué llagaste a mí
Pero mi princesa .......mamá no es perfecta.
Hoy aún eres pequeña, aún puedo cuidar de ti
Nuestro crecimiento y aprendizaje es mutuo
Eres mi pepe grillo, mi conciencia
Y a pesar de tus cortos años tienes el don de guiar mis pasos
que irresponsabilidad la mía de depender de ti día tras día