TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / Nick555 / EL PEZ Y YO

[C:561246]

Un día estaba pescando cuando un pez sacó la cabeza del agua y me preguntó:
-Amigo ¿por casualidad sabe usted cuanto falta para la primavera?
Dudé en responder, era la primera vez que un pez me hablaba y esto me generó desconfianza.
-¿Por qué necesitas saberlo? ¿Es acaso importante para ti?- pregunté astutamente para así conocer sus intensiones. Darme cuenta si estas eran siniestras y malvadas o nobles e inocentes.
-No te preocupes por mi- dijo mientras en su boca se dibujaba lo que parecía ser una sonrisa picarona de un ser con escamas. -Yo simplemente estoy ansioso por saber si esta primavera también vas a arrojar un cadáver al fondo del lago- continuó diciendo con tranquilidad.
Mi corazón empezó a latir más rápido y pude sentir la humedad en la palma de mis manos. Pensé en negarlo, en decir que no sabía de qué estaba hablando. Me tomé mi tiempo, respiré profundo y tuve una imagen más clara de la situación. Era inútil negarlo o decir mentiras. Por otro lado ¿que sistema de justicia en el mundo aceptaría la declaración de un pez como verídica? Exhalé. Entonces supe que finalmente había encontrado a alguien o algo con quien hablar sobre ese incidente que me inquietaba desde hace ya casi un año.
-¿Qué sabes sobre eso?- pregunté tranquilamente sin expresión alguna de sorpresa en el rostro.
-Los ojos fue lo que más me gustó. Los labios también. Intenté comer cerebro por la ranura que tenía en la parte de atrás de la cabeza pero no era lo suficientemente grande. Sólo pude morder algunos pedazo de cráneo que no me gustaron por que son muy duros.
-Si, es verdad. La herida no era muy grande. Durante todo este año he estado pensando mucho sobre el episodio. Constantemente se repite la escena en mi cabeza y he llegado a la conclusión que debí haber agarrado la barra del extremo inferior, bien abajo y no tan arriba como lo hice. De esta forma se puede ejercer mayor fuerza en cada golpe y necesitaría menos golpes. También la herida sería más grande y se podrían desprender pedazos más grandes de cráneo. En ese caso sería más fácil para ti comer el cerebro. Pero todo esto no lo sabía. Todos los días uno aprende algo nuevo.
-¿Esta primavera me vas a traer uno?- preguntó con la misma intensidad que tiene un gato cuando se destapa una lata de atún.
-Al principio, es decir, durante la siguiente semana al incidente me sentí muy mal. Me sentía incómodo. No soportaba el rose de camisetas, chaquetas o sacos sobre mi pecho. Constantemente tenía que estar despegándome la ropa. En la segunda semana esa sensación de incomodidad se fue disipando. Pero no fue hasta el tercer mes que empecé a fantasear con hacerlo nuevamente. Alrededor del sexto mes sentí arrepentimiento. Arrepentimiento por estar constantemente pensando en eso hasta el punto de abandonar otras labores. Entonces, cuando las fantasías rondaban mi cabeza las apartaba pensando en otras cosas, cosas de trabajo. Trabajé más y fui más productivo. Pero ahora que faltan dos meses para que empiece la primavera y he recaído.
-Dos meses. Los peces somos impacientes, no nos gusta esperar-
-Yo también lo soy. Pero necesito un motivo, no quiero caer tan bajo. Sin motivo sería como el alcohólico que toma solo. Es difícil aguantar, tener voluntad. Debo tener paciencia de pescador. Necesito un motivo.
-¿Y la víctima?
-La tengo. Es mi amigo y compañero de pesca. Tal vez nos has visto juntos. A él le fascina este lago. Estoy seguro que si le tocará escoger dónde yacer, le encantaría terminar acá en el fondo. Mi hija ha crecido, ya tiene dieciséis y últimamente he notado deseo en la mirada cuando está con ella. Presiento que mi motivo está cerca. Ya casi podré calmar esta ansiedad.
-Te deseo lo mejor amigo- me dijo mi nuevo confidente mientras se sumergía y su figura se volvía borrosa y difusa.

Texto agregado el 15-10-2015, y leído por 57 visitantes. (2 votos)


Lectores Opinan
28-10-2015 Me gusta como busca una excusa para matar otra vez. glori
19-10-2015 muy bueno, ese "pez" es buen confidente. carlosb
15-10-2015 Original relato, ingenioso final. sheisan
15-10-2015 Muy interesante cuento la conciencia del psicopàta o asesino encontrando un confidente, en un pez, como forma de conciencia en quien desahogarse, muy interesante relato original y bien planteado. original DELL
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]