| "Esta Navidad Si"... El Reencuentro Presente (el descubrimiento)
 
 
 Es Noche Buena; oscuridad; una ventana semiabierta se ofrece como
 una tentación al delito. Niños cantan villancicos en las calles;
 adicto silencio corteja penumbras en el interior de una casa…Algo ha
 sucedido; ulular de sirenas… “Noche de paz… Noche de amor… Todo…”.
 
 
 La policía se deja caer, violenta. Golpes contra una puerta. Silencio.
 Más golpes, más silencio. “¡Rompan!”, alguien ordena; patadas; la
 puerta cede; entran. Encienden luces…
 
 
 Un cuerpo, un hilillo de sangre coagulada se dibuja en un brazo; la
 muñeca de una mano tajeada; el mismo brazo que cae de un sofá; una
 mancha púrpura y gelatinosa se aparea con los dibujos persas de una
 alfombra dañada; un cuchillo. Ojos abiertos, de los que la luz fue
 desalojada lentamente; un rostro, como si hubiese saludado a alguien
 con una mueca o sonrisa (eso no está claro); es una mujer de edad,
 yace inmóvil, tibia aún, pero enfriándose. Al fin, “Esta Navidad,
 si…”.
 
 Afuera, niños y villancicos: “Pero mira como beben…"
 
 Puertas aseguradas con llave; un vaso a medio llenar de whisky sobre
 una mesa; otro vaso lleno, sin señas de haber sido ocupado; un pañuelo
 húmedo, no de agua ni de licor, ni de soda, pero húmedo, en el
 respaldo de un sillón… y un olor pesado, molesto, inefable, apura la
 náusea, agrediendo implacable los rincones de la casa y a la policía
 que entra desbocada. No hay árbol de pascua, hay un regalo sin abrir;
 no hay adornos, ni luces, ni colores, ni tarjetas con dedicatorias. Es
 noche buena. Hay desorden y mucha suciedad…
 
 
 Una hora antes
 
 
 “Esta Navidad si… esta Navidad si…”, una idea materializada o una
 ilusión cumplida; deseo resucitado cada año en Noche Buena y Navidad,
 pero que siempre, hasta ese día, había equivocado el rumbo
 extraviándose entre la indecisión o la cobardía, siempre triunfantes
 ante el amor filial, la fe y un demoledor recuerdo infinito…
 Afuera, niños cantan villancicos: “El camino que lleva a Belén…”
 
 
 Presente
 
 
 Fotos desparramadas en el piso manchadas de licor y sangre que
 retratan a hombres y mujeres, cónyuges, hijos, familias; también ella,
 aparece sonriente, alegre.
 
 
 Una voz: “¡Señor venga a ver esto!”; ruido de pasos ahuyentan al silencio.
 
 
 Un cuarto sin muebles; paredes con cientos de antiguas fotografías de
 diferentes tamaños; se repiten los rostros… y ella, feliz; miles de
 velas con agónicas llamas rodean las paredes; rastrojos de velas
 derretidas por todas partes; humo, mucho humo que enceguece las
 miradas…
 “Una vieja loca”, comentario policial. Silencio. Los niños siguen
 cantando villancicos: “El portal de Belén luce como el sol…”
 
 
 Entre una hora y 10 años antes
 
 
 Ojos ebrios, risa sana; locura temprana; llanto sano, risa ebria;
 locura nueva; fantasmas y sombras; “esta Navidad no”; regalos sin
 abrir, ecos, pisadas, seres que no están estando entre sombras que van
 y vienen, que aparecen y desaparecen; que se ocultan, que juegan, que
 llaman, que claman, que gritan, que exigen, que trastornan, que
 enloquecen; “Esta Navidad no, la próxima, tal vez”; silencio, ruidos;
 ojos abiertos, ojos cerrados, roces sin materia, otra vez lágrimas y
 recuerdos, muecas, dolor; silencio, miedo, amor. “Esta Navidad no”.
 
 
 Vasos de whisky que por años se repiten, antiguos regalos que nunca se
 abren; cada año más fotos en las paredes; cada año más velas
 infinitamente ardientes y dolientes; Cada año un arrepentimiento.
 “Esta Navidad no”; cada año más y mas recortes de diarios en las
 paredes, sin nada nuevo, con todo ausente. “Esta Navidad tampoco”.
 Cada año más desperdicios acumulados, cada año más moscas, más
 lágrimas, más whisky, más soledad, más fantasmas deambulando
 agresivos, tristes, inconscientes entre las oscuridades de la casa.
 
 
 Volviendo al presente
 
 
 Otra voz de alarma; pasos nerviosos. Nueva pieza sin muebles; paredes
 atestadas de añejos recortes de diarios…
 
 
 Pasado
 
 
 Una tragedia, diez años antes, Noche Buena; 85 muertos; un avión; una
 falla. No hay responsables, no hay condenados, no hay culpables, no
 hay sobrevivientes…
 
 
 Presente
 
 Afuera de la casa niños cantan villancicos: “Noche de paz… Noche de
 amor... Todo…”
 
 Tañen campanas, es Navidad…
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