Tirada en el piso del baño con una navaja entre los dedos, tratando de trazar esas líneas que harían llorar mis muñecas -¡saldrás ahora!- golpeaba la puerta del baño aquel desconocido con el que me acosté sin pensarlo -bien... entraré- me decía mientras abría la puerta del baño, de la cual pensé tenia seguro -¡no entres, no quiero verte!- el me miró y se sentó frente de mi, quitándome la navaja sin olvidar su fiel sonrisa -¿porqué lo quieres hacer? Se que no debería importarme pe... - me solté a llorar antes de que me terminara de hablar, él solo me abrazo y arrojó lejos la navaja. Termine contándole mi problema, él se quedaba en silencio y me escuchaba, después de un rato nos fuimos a la habitación y llore junto a él hasta quedarme dormida.
Al día siguiente cuando abri los ojos él estaba aun ahí a mi lado, me levanté lo más rápido posible y sin hacer tanto ruido pero el me detuvo agarrándome de la cintura y me abrazo para seguir durmiendo junto a él -no te vayas aun, duerme un poco más- me decía aun dormido, yo no sabia que hacer -ya es tarde, te tienes que ir- él me abrazaba nuevamente de forma acogedora y no me dejaba ir - no te dejare, yo quiero estar contigo... yo no me iré- me dijo, de cierta manera me gustaba lo que decía, me sentía confortable cuando lo escuchaba -¿cómo te llamas? Por lo menos dime eso- le dije -Daniel- me contesto en un suspiro -¿Porqué me trajiste a casa así? ¿Porque lo hicimos ayer? Yo no te conozco... - le pregunte con una voz entrecortada y ahí empezó la platica.
D- me dieron ganas de hacerlo
-¿solo por eso?
D- tu también lo querías y yo solo pensaba en componerte
- ¿Comopones así las cosas? No lo quería...
D- solo a las mujeres
- dijiste que era a la guitarra
D- pero necesitaba tocarte para ver el problema
- ¿soy una guitarra?
D-si, mira (me recorría con el roce de sus dedos de mi cuello hasta donde su mano alzara)
-¡suéltame! No soy una guitarra
D-te toco y suenas, es hermoso (lo volvía a hacer)
- ¡suéltame!
Comencé a golpearlo y sin darme cuenta otra vez ya estaba besandolo.
Al levantarme de la cama me fui a bañar y me enliste para el trabajo, sali y le deje una nota diciéndole: ¡vete! Pero al regresar mi sorpresa fue mayor, llevo sus cosas a mi casa ¿cuál era su problema? Me recibía con una sonrisa, corrió a besarme y otra vez terminamos en la cama...