| En la relación del quipucamayo Catarí cronista antiguo de los Incas, en un dato evidente y que doy por cierto por faltar originales, menciona que en Pachacamac en el lugar denominado Acabullaca  era un gran adoratorio, allí se adoraba al ídolo de la fornicación (wachuy), al que se le ofrecía ofrendas para mantener el poder sexual, aspiración máxima de dioses y hombres, reflejado en algunos huacos encontrados con escenas eróticas.
 Al llegar los españoles los misioneros dominicos enviaron a un religioso de su orden, que predico durante cuatro días continuos contra el ídolo de la fornicación  que allí se adoraba, sus bárbaras supersticiones y costumbres, al quinto día al volver a la ciudad de los reyes Lima, lo coge la noche en un despoblado entre viejas paredes y el indio que traía por guía lo dejo solo y huyo, más tarde el religioso conto a otro fraile que se le presento una mujer hermosísima y con sus actos y bailes lo provocaba con varios modos de lasciva, cuenta que viéndose en tan terrible situación se desnudó y se hinco de rodillas, saco un látigo que consigo llevaba y estuvo gran parte de la noche azotándose, al clarear la mañana la mujer desapareció escuchándose como un trueno y dejando abominable hedor, sin guía el fraile siguió un camino al azar y llego a un poblado, donde los indios le rogaron que se marchase porque se había esparcido la noticia tan velozmente, de que el ídolo de la fornicación estaba enojado y maltratado, porque toda la noche pasada lo habían azotado y que se había quejado ante ellos enseñándoles las heridas del azote, pronto los dominicos enviaron a varios de sus frailes y destruyeron al ídolo de la fornicación y lo desaparecieron.
 
 Romance glorioso
 De esta tierra Inca
 De aquellos quipus
 Con grandes leyendas
 De cosas sagradas
 Sacerdotes míticos
 Y sabios amautas
 Labriegos sublimes
 Y grandes curacas
 Esbeltez de ñustas
 Y adustez de pallas
 El verbo hecho carne
 Dios es Pachacamac
 Eva mama Ocllo
 Adán Manco Cápac
 Hizo a los quechuas
 A su más perfecta
 Pura semejanza
 Que vibre en las quenas
 Su amor y nostalgias.
 
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