A veces extraña lo que no se necesita.

En el mismo lugar, 21 de julio del 2016.

Estimada Srta. Ella.

(Por antonomasia, mujer que decidió irse y quedarse con todo)

Recuerdo que hace un año, exactamente el mismo día en el 2016, decidiste llevarte lo mejor de mi y dejarme con solo pocas defensas para un mundo que recién estaba conociendo. ¿Recuerdas que te escribí una historia llamada "Lo último que te puede dar"?, pues hoy está muy fresco el recuerdo de lo vivido y a un año de lo que pasó, recuerdo lo que no debería, pero recuerdo lo que si fue y debió ser. Por eso decidí (por última vez) escribirte esta carta como forma de expresarte lo que alguna vez se sintió en su momento (tú allá tan lejos y yo acá tan cerca de alejarme), las siguientes líneas resumirán lo que realmente pasó:

Ella y Él se conocieron, Ella lo conquistó y Él muy atento accedió. Ella quería desde el inicio aprovecharse de Él, pero nunca fue tan notorio hasta el día que ya no pudo más. Él creyo en Ella hasta el final y siguió con la aventura. Ella terminó con Él los primeros días de julio, pero su alejamiento final sería días después.

La historia cuenta que tanto Él y Ella aceptaron arreglar sus cosas pero solo era de momento, por lo que finalmente nunca pudieron llegar a un acuerdo para los dos. Finalmente por las benditas diferencias entre ambos, Ella decidió alejarse (pero en el fondo se quedó) de Él y dejarlo con los problemas encima. Él decidió escribir una historia acerca de las vivencias de Ella y curiosamente funcióno pues encontró que era una de las formas más interesantes de poder expresar lo que alguna vez sintió por Ella.

Y como muchas historias en la vida, las situaciones amorosas terminaron. Él por su camino, Ella por el suyo y aunque alguna vez se encontraron, nunca más las cosas volverían a ser como antes, puesto que dos personas que definitivamente no podían estar juntas, merecían nuevas oportunidades y ésta era una de ellas.
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A partir de ahora, las historias ya no serán más de situaciones del recuerdo, con todo esto demostré que muchas veces vivir del recuerdo de lo negativo no lleva a ningún puerto. Es por esta razón Srta. Ella, que espero que cuando Ud. lea esto (en realidad espero que no lo lea ni le tome importancia cuando lo vea) se dé cuenta que aún existen personas que son capaces de guardar muchas situaciones que valieron la pena y aunque algunas personas como Ud. no supieron aprovecharlo, no significa que ese sea el final.

Hoy, 4 días después de cumplirse un año y totalmente convencido de la vida y muy feliz con las oportunidades, decido darle final a lo vivido y poner en claro que la vida tiene aún mucho por mostrar, que las personas tienen aún mucho por dar y que muchas veces es correcto , necesario e importante aprender a ordenar esos recuerdos que existen puesto que, aunque Ud. crea que son correctos, muchos de ellos no no necesarios ni para mi, ni para Ud., ni para nadie. Y recuerde, muchas veces la mejor manera de olvidarse de algo, es recordándolo. Aprendiendo a convivir con el recuerdo.

Atentamente,

Él hombre.
(Por antonomasia, persona que a veces extraña lo que no se necesita.)