En un mágico mundo donde todo esta conectado los seres de energía crean realidades manifestadas mejor que en un cuento de hadas.
Los seres de energía crearon sus cuerpos físicos en la realidad con emociones y pensamientos identificados con el entorno; experimentan esa realidad aparentemente sólida separados, pero la chispa divina en su corazón al contactarse consigo mismo se modifican en la forma para vibrar energéticamente. Integran los cuerpos, pensamientos y emociones envueltos entre un vórtice de energía cósmica que influencia lo mágico y benevolente.
Atravesando el umbral para explorar caminos nuevos con paz del convencimiento interno la naturaleza del SER humano surge; el ADN es un basto tesoro que decodifica experiencias pasadas y su campo energético alrededor con el AMOR activa la sublime energía en el corazón sintiéndolo en una forma espiral que llena internamente para luego dejarlo fluir al exterior.
Con la chispa de luz en el centro del pecho crean con la energía de los pensamientos, con inteligencia infinita crean vida infinita sin estar nunca fuera del AMOR divino para expandirse los seres de energía en los universos, luego fundirse en la totalidad. Con herramientas creativas intervienen en la realización percibiendo problemas como lecciones para emerger en el próximo instante con más confianza disfrutando del canto de la creación que vibra en el mágico corazón.
Seres de energía con AMOR expansivo se sumergen en el instante, creando positivos potencian sus nacientes destellos al mundo espiritual. El principio incesante ha comenzado cuando sus alas el sol expande para volar en cada soberano corazón de los seres de AMOR.

j.c.n-11-8-2017