el tiempo... el tiempo... pasa como arena entre los dedos...
salí como siempre, en busca de algo hermoso... cerré lo ojos y traté de sentir la pureza en mi ser... abrí lo ojos y encendí el auto rumbo al diario laburo... es feriado, pero, es un día a descubrir como un regalo o caja de sorpresas...
el tiempo... el tiempo... llegué al local... aún estaba oscuro... y la gente aun dormitaba... había pureza en el aire... entré y encendí las luces... me senté en el escritorio y empecé a laborar... pasaron las horas y llegaron tan solo dos empleados... salimos a la venta... pasaron las horas, pocas personas en las calles... el cielo era precioso... y las personas también... escribí un poema en mi celular... el tiempo pasaba, siempre... el tiempo...
terminé la venta, les di para que comieran... y les dije hasta mañana... el tiempo se detuvo frente a mis ojos... todos quedaron estáticos... ni aire, ni viento... tan solo el silencio y el tiempo se detuvo ante mis ojos incrédulos... el tiempo se detuvo... quizás estaba muerto... no lo sabía... entré a mi oficina y me senté cuando del fondo del silencio escuche una voz... traté de escuchar mas... y al fin escuché... "respira... respira... respira..."... respiré y al instante todo volvió a moverse con el tiempo... será que el aliento tiene el poder del tiempo?... eso sentí, pero, quizás nadie podrá creerlo... fui al baño y me miré en espejo... Dios!... estaba bastante viejo... pero, qué puedo esperar a mis sesenta y nueve años... tan solo respirar y ver pasar el tiempo y muy de cuando en vez, detener el tiempo con el poder del aliento... si... es posible.. si... si...