Lamentas, mago
con el alma rota
tanto lamentas
tu primera derrota.
Eras famoso mago
que todo lo podías
con tu varita mágica,
al cuy, gato o tucán
humo los hacías
en tu sombrero truhán.
Y traías las lluvias
a campos sedientos
y a frescos vientos
a refrescar los rostros
y a sublimes arcoiris
para adornar al cielo.
Miles de hombres
de vida amargada
en febril caravana
buscando tu morada
valientes surcaron
valles y montañas
montes y heladas
ciudades y mares
colinas y quebradas
y al fin te hallaron
con tu frac en la puna
dormido boca arriba
una noche sin luna
y urgidos te cargaron
sobre sus hombros
y te llevaron cual Mesías
a que cambies sus días
o vivan entre escombros.
Culminada ya
la gran procesión
te hicieron ver
la faz de la aldea
más triste del mundo,
como rota bandera
que cabizbaja ondea
y te suplicaron
que lo hicieras,
mas fuiste sincero
que realmente eras
un mago truquero,
que no ha nacido
aún varita mágica
que haya vencido
a esa plaga trágica.
Y te fuiste tras perder
envuelto de soledad
impotente de no ser
una mago de verdad.
Esa mañana bonita
te rogaron la proeza
que tu mágica varita
haga polvo a la pobreza.
Texto agregado el 18-10-2023, y leído por 158
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Lectores Opinan
30-11-2023
Muy bueno,fluido y en partes triste...
El mago no puede hacer lo que le piden al último*****
Victoria 6236013