¿Cómo deberá ver la Madre Naturaleza, que todo lo regula, las nuevas orientaciones sexuales de los seres humanos?
Jober Rocha
La naturaleza es un sistema complejo y dinámico y la sexualidad humana es sólo una de sus muchas manifestaciones. La naturaleza no es, aparentemente, un ser consciente y por tanto no debería tener opiniones o creencias sobre la sexualidad humana.
Sin embargo, la naturaleza, al seguir sus propias leyes inmutables, puede verse como un entorno que da forma a la sexualidad humana. Por ejemplo, la naturaleza proporciona los recursos necesarios para la reproducción humana, incluidos alimentos, agua y refugio. La naturaleza también proporciona los estímulos necesarios para el desarrollo de la sexualidad, incluidos los sentidos humanos necesarios para el contacto físico, las interacciones sociales y las experiencias culturales.
Las nuevas orientaciones sexuales de los seres humanos son, simplemente, una expresión de la diversidad natural de la sexualidad humana. A primera vista, no son una amenaza para la naturaleza y, de hecho, pueden verse como una señal de que la naturaleza está funcionando como debería.
La naturaleza, sin embargo, es un sistema que evoluciona con el tiempo. La sexualidad humana también evoluciona y las nuevas orientaciones sexuales deben verse como parte de esta evolución. Pueden ser una respuesta a cambios en las condiciones ambientales o simplemente una manifestación de la variabilidad natural de la sexualidad humana.
Independientemente de sus causas, las nuevas orientaciones sexuales son, por tanto, parte de la naturaleza humana. Deben ser aceptados y respetados, como todas las demás expresiones de la diversidad humana.
Aquí hay algunas formas específicas en las que la naturaleza podría ver las nuevas orientaciones sexuales de los humanos:
La naturaleza puede proporcionar recursos y oportunidades para que personas de todas las orientaciones sexuales vivan e interactúen. Por ejemplo, la naturaleza puede proporcionar alimento, agua y refugio a personas de todas las orientaciones sexuales, y también puede brindarles oportunidades para reunirse y vivir juntas.
La naturaleza puede promover la diversidad y la inclusión. Por ejemplo, la naturaleza puede promover la diversidad de especies, incluidas especies que se reproducen de diferentes maneras. Esto puede ayudar a promover la aceptación y el respeto por las personas de todas las orientaciones sexuales.
La naturaleza puede ayudar a las personas a comprender y aceptar su propia orientación sexual. Por ejemplo, la naturaleza puede brindar experiencias que ayuden a las personas a explorar sus sexualidades y encontrar sus identidades sexuales.
En última instancia, cómo ve la naturaleza las nuevas orientaciones sexuales de los humanos es una cuestión de perspectiva. Si se considera la naturaleza como un sistema dinámico y en evolución, entonces las nuevas orientaciones sexuales pueden considerarse una parte natural de la diversidad humana.
Las orientaciones sexuales, por tanto, constituyen una parte natural de la diversidad humana y no afectan a la naturaleza misma, a menos que cambien la tasa de fertilidad considerada normal o provoquen un desequilibrio significativo entre las tasas de natalidad y mortalidad, reduciendo el crecimiento natural de la población. Según la ONU, la tasa de fertilidad normal sería de 2,1 hijos por mujer, cuando dos hijos podrían reemplazar a sus padres.
Las tasas de natalidad y mortalidad son indicadores demográficos determinados mediante cálculos matemáticos precisos. La tasa de natalidad representa el número de nacidos vivos, mientras que la tasa de mortalidad indica el número de muertes en un lugar determinado. Los resultados obtenidos ayudan a comprender la dinámica poblacional de un lugar determinado, demostrando su crecimiento o declive. El crecimiento vegetativo o natural de una población es la diferencia entre las tasas de natalidad y mortalidad y puede verse alterado por prácticas sexuales entre personas del mismo sexo.
La naturaleza es un sistema complejo que incluye muchas especies diferentes, cada una con sus propias características y comportamientos reproductivos. La sexualidad humana es sólo una pequeña parte de este sistema y, normalmente, los casos de homosexualidad no tienen un impacto significativo en la naturaleza en su conjunto, ya que suelen ser episodios aislados y menores. Sin embargo, las campañas institucionales promovidas por el Estado, a nivel mundial, incentivando esta práctica y su difusión entre las poblaciones, pueden resultar en una reducción del crecimiento natural de la población humana mundial.
Sin embargo, es importante recordar que la diversidad sexual es un aspecto importante de la diversidad humana y debe ser respetada. La aceptación e inclusión de personas de todas las orientaciones sexuales es un paso importante hacia la construcción de una sociedad más justa y equitativa. Los medios de comunicación desempeñan un papel importante en la promoción de la comprensión y la aceptación de las diferentes orientaciones sexuales, y muchas celebridades han utilizado su plataforma para ayudar a desmitificar expresiones y orientaciones sexuales menos conocidas. Lo que no se puede hacer es imponer la orientación sexual a las personas, especialmente a los jóvenes, con fines políticos y económicos, como reducir la población mundial, por ejemplo.