Y yo procuraré no suspirar tan a menudo
Y acostarme a una hora prudente.
Yo sé que afuera, inevitablemente,
Me está esperando una nueva mañana

Ismael Serrano - Te Vas
¿Qué puedo decir?, Le Amo


La Mudanza


La había visto varias ocasiones en la calle
Curiosamente cada vez que yo salia, ella de alguna manera se las arreglaba para aparecer
Tenía una dulce sonrisa y todo en ella sabía a sutileza
Me llamaba la atención que siempre que nuestros caminos se cruzaran, ella sonreía al verme
Y nos cruzábamos muy seguido
Así fue que primero noté su presencia y segundo
Comencé a verla
“Hola Vecina” - Le decía todo amistoso cuando la veía
“Hola Vecino” - Me respondía ella toda sonriente
Si llegaba a ocurrir que estaba muy lejos para poder hablarnos, me saludaba con un gesto de la mano
Un gesto que yo devolvía
Como siempre, ella toda sonriente
Y yo, todo amistoso
No éramos amigos
No éramos ni siquiera conocidos
No éramos tampoco vecinos
Claro porque yo vivía ahí, pero no vivía ahí
Éramos sin embargo, algo…
Un incipiente e indefinible algo…
Y yo que ya no quiero ser algo, con nadie
Así que me mudaba y estaba bien
Había comenzado a sacar mis cosas en pequeños viajes
Por supuesto, cada vez que salía a cargar mi automóvil, ella andaba por ahí
Me sonreía
Yo le sonreía
Nos saludábamos y rápidamente desaparecía
Me daba la impresión de que le preocupaba que yo pudiera pensar que era demasiado sonriente conmigo
Y que pudiera además pensar que estaba interesada
Interesada en mí….
Pero lo se bien
A mi esas cosas no me pasan
Finalmente, llegó el camión de la mudanza
Así que saqué lo que quedaba y me fui llevándome todo
No dejando nada
Tenía que volver a hacer entrega del departamento
Así que regresé
Regresé por última vez
Hablé con el dueño, le agradecí haberme permitido vivir ahí, le entregué las llaves y me despedí
Al salir, ella estaba ahí
Lucía un traje rojo no muy ajustado
Se veía guapa
Me vio, se sonrió y me hizo un gesto con la mano
Yo me quedé mirándola, sonriente
Cómo está Vecina? - Le dije
Bien - Me respondió ella
Yo pensé: “Es verdad, está muy bien”
Esta sería la última vez que la vería
Ella, como si lo supiera, se queda de pie, mirándome sonriente
Como esperando algo
Yo la miraba como si estuviera evaluando
La miraba
Me miraba
Podía sentir un incipiente vínculo
Yo la miraba
Ella me miraba
La fortuna favorece a los audaces me dije
Pensé en hablarle
Entonces, me vi
Me vi padeciendo una vez más el desamor
Y al mirar mas de cerca, vi ms allá
Vi las distancias
Vi las diferencias
Vi las ausencias
Me vi otra vez vencido y derrotado
Bajé la vista
Subí a mi automóvil
Podía sentir su mirada expectante en mi espalda
Arranqué el motor
Comencé a avanzar
Pasé por su lado sin mirarla
Doble la esquina y me fui para siempre
No volví la vista atrás


Randal Tor