En lugar de soltarte pronto
me aferré a ti con más sentimiento
tú te soltabas a la fuerza
no te daba dolor mi tristeza.

Me dejabas abrazarte un minuto
luego me decías suéltame
en ese minuto tocaba el cielo
tan pronto te soltaba volvía al infierno.

Un mes en el infierno
era demasiado tiempo
no te imaginas el esfuerzo que hacía
para no morir en el averno de frío.

Por un minuto de felicidad
me condenabas a un mes de dolor
mientras te volvía a abrazar
todo perdía color.

Condenado a ver la luz
después de treinta días
cargaba la cruz
de mi desgracia.

El dolor no paró ahí
desde el día que te di
el último abrazo
no te volví a ver.

Ahora no salgo del infierno
y para qué voy a salir
afuera todo está oscuro
sin ti nada tiene color.

PEDRO MORENO MORA