Ghosting

Tu estar sin estar,
vigilante y ausente,
para dañar sin palabras.

El mal hecho silencio
y ausencia,
cual mejor venganza
jamás hecha.

Te quedas en modo fantasma,
pero tu corazón te carcome
para gritar así sea un hola.

Mas la cobardía y el orgullo
ganan tal batalla,
y solo te quedas allí
impávida vida cual espectro sin alma.

Enfermedad que aqueja
estas generaciones,
qué intentan dañar
sin ninguna culpa.

Por eso, desvelo tu secreto
con el poder de la palabra,
para exorcitar tu presencia,
y recuperar mi serenidad.

Adiós ghosting que haces
para dañar.