Espero no equivocarme otra vez. Posiblemente tome un par de monedas, las llaves de la casa, y parta a caminar, a caminar rápido. El destino en estos momentos no existen, a donde me lleve la conciencia.
Suelo no tomar atención en situaciones como estas. Pierdo la noción del tiempo. Ahora soy solo yo y los demás.
De todas formas, ni siquiera es papel y tinta, son solo letras. Las letras no me dicen nada. Es tán fácil teclear....Repaso, mmm...y pienso que ahora mismo, desaparecen los muros, los parches, las orejeras, los tapones...surgen los problemas, los nudos, los colores de toda la historia en blanco y negro. Así también voy confeccionando una madeja, hilvanando...tratando al menos de hacerlo. Montones de nudos trancan todo de a poco, lentamente...
Me desespero, pierdo el control.
Comienza la carrera de los pro y los contra, lo bonito y lo feo, lo negro y lo blanco (blablabla), etcétera, etcétera, etcétera; las hebras se trizan, y no sé que hacer, no sé...no sé....
Y a medida que todo pasa, camino más y más rápido, o más y más lento. En realidad no me doy cuenta, hasta que descubro santa rosa o departamental.
A veces me dan ganas de correr mucho, y muy lejos; no en la ciudad, no donde estén esos obstáculos tan desagradables.
El problema es que el tiempo es lo único que no se detiene, y hay que afrontarlo. Durmiendo no soluciono nada. No sé...no sé....
Que más da....si ya es de noche, y la abuelita vive cerca. Su hogar tiene ese algo...es un lugar aislado, desconectado de todo, aun teniendo radio y televisión, cosa de entrar y abstraerse.
Ahí no encuentras esas letras,...las aborrezco tanto....frívolas, banales, hipócritas, sínicas, escritas a oídos sordos; desaparecen de los caminitos, se hacen a un lado, y se caen por la sequia, el agua se las lleva....terminan a kilometros. Mejor así, un ratito que sea. Es que siguen el ciclo del agua.
¿Y si paso la noche aquí?
Tu felíz de eso ¿cierto?
Si esto es acogedor........