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Prefiero ser gordita -dijo Gertrudis- a andar perdiendo el tiempo vistiendome por horas, mirandome en el espejo, corriendo en el gimnasio, razurandome los pelos, haciendome las unas, pintandome los labios, y pelandome las tetas, tan solo para andar impresionando a los flacuchos, mequetrefes de la escuela.

Me gusta como soy, no como Cindy Sways, una chica plastica, "rubia" (que ni sus piojos se lo creen), con un cuerpo perfecto cortesia de muchas sesiones intimas con un inodoro. Cindy se burla de mi; Bueno, ella y todas sus amigas se burlan de mi. Lucen igual y es mas, hasta parecen fotocopiadas: altura mediana, camisas apretadas, brasieres demasiado pequeños, y de mini falda (diganme porfavor, quien se pone puti-falda para ir al colegio?) La personalidad? que personalidad! Ahi si cabe la completa descripcion de "fotocopiadas," cada una identica a la anterior, pero de menor calidad: De tonta a estupida, de estupida a idiota, de idiota a imbecil, y de imbecil a Cindy Sways. Claro, la jefa del peloton, la porrista principal de la absurdidad, la de el coeficiente intelectual mas bajo de el continente... y por supuesto, tenia que tambien ser mi vecina.

Yo Gertrudis (Mi bello nombre procede de una senora que mi Mama conocio en una pasteleria en Alemania) soy hermosa. Hermosiiiita. Unos 15 a 30 kilos sobre peso... pero me encaaantaaaan! Me visto siempre de Lila, es mi color favorito, y no soy gorda por genetica, sino, porque me gusta el chocolate. Mejor dicho... AMO EL CHOCOLATE! No soy porrista, ni me interesa. Tampoco me interesan las opiniones de flacos mequetrefes, ni de mujeres brutas y vacias. De todas formas, yo soy feliz.

La hija de puta de Cindy, a la edad de la pubertad, se desvestia en su ventana para que yo pudiera ver como habia desarrollado su cuerpo. Yo no madure sino hasta dos anos despues, pero para ese entonces, ya estaba aburrida de verle las tetas y su cintura, y por mas que en esos dias anoraba que mi cuerpo pareciera el de ella, no tuve mucha decepcion al empezar a elevar mi "KILO-METRAJE" (a como me jodian en la escuela), porque mis tetas salieron mas grandes que las suyas, y mi cintura, tambien mas grande que la de ella! asi que gane!

Lo que me costaba entender, era como estas ninas eran capaces de hacerse tanto, simplemente para sentirse mejor si mismas: cirugias, dietas, vomitaderas, ejercicios absurdos, mamadas a los muchachos populares por los campos de futbol, etc. Para colmo, estas ninas (siendo la lacra de la humanidad), tenian el descaro de burlarse de alguien que era perfectamente natural: buena alumna, divertida, coqueta, y que jamas hubiese tenido algo en la boca, que no hubiese querido tener.

Ellas me miraban con asombro cuando me sentaba a comer en el recreo. Ponia mis 3 coca colas, 2 tacos, 6 burritos, 2 chalupas, 3 empanadas, 2 bunuelos, 3 bolsas de platanitos y 2 snickers, y me ponia a comer con tranquilidad (y eso que era el recreo pequeno). Ellas trataban de lucir que me miraraban con desprecio, que me miraban con asco! pero yo sabia que lo hacian con envidia. Ya hubieran querido saborear algo de mi divino festin... y mas aun con lo deliciosos que estaban los snickers. A ellas, se los negaba el ego; se los negaba la conciencia. Era ahi cuando yo gozaba mas.

A mis Papas nunca les costo apreciar mi belleza. No se si habria sido porque era su hija, o si mas bien era porque algo bueno veian en mi, de todas formas, siempre nos llevamos muy bien. Por lo contrario, a mi me daba pesar la mama de Cindy, como salia empericuetada y maquillada (talvez peor que la hija) para ir a dejarla a la escuela. La vieja no podia vivir sin las miradas y cumplidos que le daban los morbosos "amigos" de su hija cuando se bajaba a saludar. Competia con su hija; Necesitaba la admiracion de todos. Por eso yo le encaje a Cindy el apodo (y esto nunca se lo comente a nadie por pesar que me daba ella) de "Hija de Puta."

Total, me gradue de la escuela, y fui a estudiar al exterior. Paso mucho tiempo antes que volviera a ver gente de mi clase. Una vez, pasando los canales en la tele, me detuve en "Jerry Springer" al ver una mujer llorar. La reconoci de inmediato. Si, era ella, habia aumentado de peso, pero la reconoceria donde fuera; Era Cindy. Vestida como siempre, puti-falda, pelo tenido, tacones altos, maquillaje en exceso, etc. Era ridiculo. Lloraba en el show porque su marido la habia abandonado, que su peso la marginaba, que la sociedad la descriminaba, que era infeliz, que odiaba su vida, que odiaba el chocolate, que odiaba todo.

Me dio mucho pesar verla asi. Apague la tele y me levante, camine a la cocina, le di un gran beso a mi esposo, abri la refrigeradora, y saque un snickers. Estuvo delicioso. =)

Texto agregado el 18-11-2004, y leído por 233 visitantes. (2 votos)


Lectores Opinan
16-02-2005 muy bueno... pero me parece que el final es un poco fantasioso... usualmente esas mujeres como cyndi no engordan, ni van a un show de television... y la gordita del chocolate debe de estar hecha una ñoña para esa epoca! ... de todas maneras estuvo gracioso... t dejo mis estrellas. yussi
31-01-2005 1 eladoscurodelcorazon
19-11-2004 mercu, y ahora te digo yo a ti q este es uno de los textos mas reales que he leido aqui o en mi vida. bravo bravo! eladoscurodelcorazon
 
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