Las bocas comen pasto y vomitan arena. 
Las bocas tienen hambre, rozan bocas. Cubren de mermelada y chocolate los besos de otras bocas. 
Las bocas absuelven o asesinan, fieles a su costumbre de irse de boca. 
Las bocas ríen, en un escándalo que diluvia sobre las bocas que hacen pucheros. 
Las bocas se fruncen e insultan tantos oídos, que las caras son bocas, y oídos, y más bocas. 
Las bocas se perfilan como grandes oradoras, mientras un público impresionado las saluda, en silencio, o con vítores de otras bocas. 
Las bocas hablan, se expresan, se divierten o lloran. Pero cuando viene el cuco y las ataca,despiadado, montado sobre équidos de muerte, entrecortando el aire a punta de metralla, entonces, sólo entonces, esas bocas se cierran como el sueño, se sellan, no son nada.  |