Sus caprichos al reloj



Cuando al caer me agarró
de la mano, el sudor desgarró
esa despedida sin adiós
dejando las cenizas sobre el plato
y la cuchara a su lado...

El sombrero de su antojo yacía
sobre el mantel color fresa
esperando a su amo...ese
que le esmeraba presencia
y sacudía días soleados...

Al caer sobre el vanidoso adiós
el suelo cantaba al oído de una golosa galleta
mordida sobre el sillón olor a café...
volviendo a la memoria un badén de luces juguetonas
saltarinas y fogosas...
y ese botón que jamás lloró su soledad aún
sobre el nada, esperando, solo, esperando...

la aguja de cada reloj bailan
a merced de su hechizo
soñando la esperanza prometida
y desquiciada...y espera...
pero solo sus bezos borrarían
de la faz de la tierra el miedo
a perderme...a buscarme...a encontrarme.




The End...




CHINAYA