No hay peor sentimiento que la indiferencia.
Es totalmente ilógico como en un frio instante los sentimientos se pueden reducir a un crudo y convencional roce de un lápiz sobre una hoja.

No hay peor estado que ese en el que se encuentra el que se ha secado totalmente tras derramar mil y una lágrimas, el que ahora solo respira, y sobre el techo mira al pasado.. extrañando el dia en que extrañaba..

Qué incoherente es ser humano, que patética resulta la fe - nada.
Soy indiferente.
Qué absurdo es serlo, que absurda es la necesidad de una larga agonía para terminar estancado en la indiferencia y el olvido, en más allá de la distancia y en un claro y definitivo adiós.
Adiós.