miralo
despacio corriendo por el jardin
atrapando moscas
comiendose las nubes
disfrutando de las vacaciones doradas del anonimato
un gran hombre se comera sus entrañas
una mujer se comera sus ideas y palabras
oyelo
acercarse al sexo
tratar de tocar al sol con la lengua
y jugar con la flauta haitiana
bajo la sombra del arbol
orina
y se baja los pantalones para mostrarle el pene
al mundo espectador
al circo ambulante
de enfermos mentales
al final del dia
regresara
al sueño de las gaviotas.
Texto agregado el 03-03-2005, y leído por 293
visitantes. (3 votos)
Lectores Opinan
04-03-2005
Más que un niño has descrito un cachorro de humano. Muy lindo. libelula
03-03-2005
mas que escibir dibujuste una historia, ¡que bonita era la infancia!cuando a uno no le importaba nada ni el mundo con sus problemas. solin
03-03-2005
Me ha gustado mucho. Has conseguido un retrato excelente del niño que crece ajeno a lo que le espera en el voraz mundo, cuando todo lo que te rodea no tiene mayor importancia que los juegos y las sensaciones primeras. La naturalidad de la ingenua infancia debe ser protegida. Enhorabuena. Saludos. Monelle
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