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Peroné ® Arturo E Gazzo

“Una de las ventajas de la edad madura es que
tus vergüenzas, tus errores y tus pecados de juventud
se han disipado y olvidado a través del tiempo y que definitivamente…
tus delitos han prescrito ante la ley.”


Tenia que armarme de valor para hacerlo… después de todo no es fácil decirle a una madre que le has roto la pierna a su única hija, en un accidente con tu automóvil.

Me aproxime a la casa lentamente, una sola planta, un pequeño jardincito al frente, la fachada había conocido mejores tiempos y ahora se mostraba descascarada en las esquinas, a lo lejos se percibía el sonido de las olas rompiendo furiosas en la playa de piedra, algunos colectivos pasaban raudos por la costanera.

Apreté el timbre… pero este parecía no funcionar, golpee la puerta despacio pero con insistencia hasta que escuché pasos que se aproximaban y esta se abrió mostrándome una señora de mediana edad en ropa de entrecasa; de la cocina venia un tufillo con aroma a guisado, cosa muy normal a las once de la mañana en cualquier casa del distrito de San Miguel.

- ¿Es usted la madre de Rosa Hernández? Le pregunte, aunque esta era una pregunta idiota, porque la dama era una versión envejecida de la chica que yacía en una cama de la Clínica Delgado en Miraflores, con la pierna izquierda en una carola de yeso.

- ¡Si!... ¿Por qué? Fue la respuesta.

- ¡No se alarme Señora! Le dije con cara circunspecta.
- Su hija Rosa ha tenido un ligero accidente, pero esta bien. Termine.

- ¿Qué ha pasado?
- ¿Dónde esta?
- ¿Qué tiene?
- ¿Esta viva?
Me disparo todo al mismo tiempo no dándome oportunidad de contestar coherentemente.

- No se alarme, no es nada grave… la he golpeado con mi carro y tiene una pierna rota. Le dije casi sin mirarla.

La señora me soltó un insulto --- que no quiero repetir para no herir la susceptibilidad de mis lectores --- y parecía que quería matarme.

- He venido para llevarla a la Clínica para que vea a su hija, que realmente no tiene nada grave.

La señora se arreglo lo mejor que pudo cerro la puerta y la lleve a la Clínica…
Rosa recostada en los almohadones, con el pijama que proporcionaba la Clínica y la pierna izquierda enyesada hasta arriba de la rodilla, parecía una virgencita con su cara de niña buena y sus gestos de dolor.

- ¿Mocita que te ha pasado? Pregunto la matrona realmente angustiada.

- Ay Mamí, al cruzar la pista me descuide y este señor me atropello. Respondió la niña.

- ¡Voy ha hacerle juicio, voy a meterlo en la cárcel! Me amenazo la señora ciega de rabia.

- Ay mamá, la culpa fue mía, que no me fije si venían carros al cruzar. Me defendió la chica.

- Señora no se preocupe de nada, yo pago la clínica y todos los gastos, tengo que ir a trabajar, pero regreso a la tarde para llevarla a su casa…
Tenga estos cincuenta soles, para que coma algo en la Cafetería.
Le dije y me retire casi con el rabo entre las piernas.

Cuando regrese en la tarde, la señora estaba totalmente calmada y me agradeció que me ocupara de curar a su hija, aun sin ser mi culpa.

Conversamos un rato, de cosas que por no tener importancia ya he olvidado y le ofrecí llevarla a su casa, prometiéndole que al siguiente día sacaríamos a la chica de la Clínica.

Luego de llevar a la señora de regreso a su casa, retorné al hospital para estar un rato con la Mocita, la encontré coqueteándose con el Doctor --- esta Mocita nunca iba a cambiar, ella como siempre… mas puta que una gallina.

Se acuerdan que en el burdel de Pacasmayo en el Verano de 1956 (http://www.loscuentos.net/cuentos/local/ElTigre/8386/?nc=223)… Dios me presento a un viejo conocido, que era un aprendiz de Medico en vacaciones y me dio un rápido remedio para la Ninfomanía, pues había terminado su carrera y conservábamos una relativa amistad --- aunque sigo sin recordar su nombre luego de cuarenta años de no vernos o tal vez por ingerencia del Alemán --- y que no se si se porto como un buen amigo, enyesándole sin necesidad la pantorrilla a Mocita y permitiendo que el aborto de tres meses que perpetro se reportara como rotura del Peroné… o simplemente lo hizo por los mil Soles que me cobro.

Texto agregado el 12-03-2005, y leído por 332 visitantes. (11 votos)


Lectores Opinan
29-06-2006 Exquisito, simplemente ! IsamaR
24-10-2005 Jajaja. Me encantó. Buen texto y un final sorprendente. honeyrocio
22-08-2005 Eso vale..., la vida aveces es como se la muestra, y no como realmente ocurre. Muy buen relato (que nos puede representar una mentira a una mujer..., despues de lo que ellas hacen con nosotros, o no?) Un abrazo. CalideJacobacci
20-08-2005 Uyyyy, de verdad nunca me lo hubiera imaginado, en realidad los hombres son bastante astutos.Excelente trama, que bueno...Te pasaste***** Besitos Victoria 6236013
23-07-2005 muy buen cuento, me sorprendió el final india
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