Te encontrabas ahí, en la mitad de un todo, en un mundo extraño, en una tierra de lluvias y de nieves, de noches largas y soles ocultos. Ahí, entre los millones de amigos extraños de sueños compartidos, de recuerdos mutuos, todos ellos con una lengua ajena, con un dialecto muy raro, de brincos y saltos, entre silabas de amor de ojos y notas de piano, cientos de frases que no entiendo pero que aun así danzaban sin cesar en tu cerebro, era una día de soles molestos. Tu transformabas las palabras a tu conveniencia, el piano, la voz grave, los ojos cerrados, las almas hambrientas, ellos contaban de unas puertas del no se que Cielo? Infierno? Limbo? Un tal Dante y un tal Dios. Un segundo paso y me mente se pregunta, será esta tan solo una ilusión o desesperación, talvez otra mentira, pero ahí unas puertas, altas, grandes, de un metal oxidado, con un viejo bello de años o siglos. Todos estaban bien ubicados entre la vegetación, unos tratando de oler las aves para no ver animales humanos, otros con 2 o 4 palabras de sonidos familiares, OH Dios o Dante que marcha tan larga. Las noches se han convertido en tu suelo y en ese cielo no hay luz, todo es de un rojo triste de azul bello, la combinación perfecta entre la canela y una piel que sigue cambiando de color, Cielo e infierno, Ambos, Cielo O Infierno?. Tus pasos retumban en la puerta gruesa que parece mas débil cada paso, que aparenta crecer con las miradas, con la respiración lenta de agonía, con ambiente turbio, rojo y azul, las aves ya no susurran, quizá te vieron, oculto sumiso.
Tocas el final del camino y ahí la puerta, la entrada a la nada, al todo, al mañana, al recuerdo, al Cielo con Infierno, Donde se anida en la Tierra? Quisiera volver a sentir las punzadas del corazón después de la primera respiración, el dolor de la sutil palmada que me abanico los pulmones, del favor que te hizo el hombre de blanco, Favor? Dejarte a un mundo lleno de aromas y amores, Favor?. La puerta es de un cristal opaco en el cual los demás no se reflejan, no el cielo rojo o las nubes, no los árboles o los animales, ni los sonidos testiculares se pueden ver, la única reflexión son unos ojos, esos ojos que tu has visto antes, en tus primeros años de vida, el día que inicio la agonía, la jornada fría, los ojos con aquella soledad que te ha asechado 52 años 4 meses de los que llevas dormido. Alguien te llama con amables sonidos, ahí, delante te encuentras tu en cuatro amarillas dimensiones de vacío de aire, le tocas la frente al guerrero de la serpiente emplumada, te habla con su acento humano, yo sonrío, me cuenta una broma y me rió, una musa te voltea la cara, es Jesús de 24 sonrisas, con su cabello largo y negro abrazando a un emperador azteca y con el un humano que esperan los monjes, en la ventana del cuarto vacío vez colores y drogas mujeres, todo es bello y las palabras se mezclan perfectamente para sonar como el idioma que quieres entender Cielo-Infierno eso es lo que es.
Todo se detiene una lagrima ha separado de nuevo al Cielo-Infierno Quien tendrá ese poder? Tu? Yo? De vuelta a la cama donde tu mente ha dormido por los meses que tu cuerpo renuncio a seguirla.
Tan lejos del lugar que conoces, de playas verdes y de pescadores amables de unos 12 personajes históricos, en la tierra nevada de árboles altos y lluvias eternas, tan lejos. La muerte, la muerte complicada de un alma infeliz del que hizo la decisión equivocada. Saliste del vientre maternal al Cielo-Infierno.