Noche. Alma. Sonrisa. Humo...
Como nada explica tu aparición desenfrenada.
Ya a estas alturas esas palabras
suenan vagas y amorfas... no es ke nada tenga,
sino poco sentido encuentro en ellas.

Lagrimas hoy, suspiros después,
La agonía de mi corazón es muy evidente.
Y esas calles vacías, me aprietan el alma
y me consumen a años de soledad infinita.
No comprendo por ké se dio así, pero a pesar
de tu muerte no me convenso de esto.

Ridiculo sería creer ke como un Cristo resucitarás,
para ké, prefiero morir pensando en tus labios rojos
diciendome esas últimas palabras antes de partir.
Podría acotar, si mi boca escasea en frases
mientras mi mente se pudre en el espacio,
sin edtener el paso inexorable del tiempo.

No puedo más...
No kiero más...