Cuando los personajes de los cuentos de hadas no vengan en tu ayuda,
cuando sostengas mi mano como lo hice cuando naciste, cuando eras transparente,
cuando te duela verme a través de los plásticos del oxígeno,
cuando pienses si alguna vez volveré para ser tu padre,
cuando se abra el suelo y caigas sola, sabiendo que ya no estaré para ponerte de pie,
terminará tu carga de recordarme,
con los recuerdos que queman,
libre de mí,
y de mi silencio.