Extravíe del bosque su fragancia
encontré mil vidas en su memoria,
trasnoche vagando entre jardines
Con el corazón luciendo su alegría.

Voy buscando ese sendero milagroso
donde abundan colores primorosos,
todo renace si miramos esperanzados
que es la vida cristalizando su belleza.

La nostalgia que nos cubre se evapora
cuando sentimos que nos esconde la tristeza,
en la trinchera donde soñamos despiertos.

Las imágenes de ayer son nuestra impronta
nos persigue con su aura tejedora, en el eco
nos aprieta, nos atrapa en la quietud del vacío.

Es por eso que la noche oscurece de repente
nos absorbe sin piedad en su vértigo,
disipándose al amanecer nos enternece.

¿Es otoño una estación para soñar hojas secas?
que en los atardeceres asombra su dorado,
el médano se pierde con el viento, así también este lamento.
Que gira para encontrar el claro iluminado.
Vagando en las tardes tormentosas.

A-M-R