Ella lo es todo, nada más...
ella se deja acariciar con las palmas de las manos, con las puntas de los dedos, con las curvas de las uñas, y me dice que le rasque la espalda, si! claro mi niña, lo que tu quieras. y me quedo a navegar en los surcos de su cuerpo.

ella se deja encender aun en las noches más frías, aun entre los tiempos más adversos, es aún ella la luz que me da vida y me sabe envolver entre sus brazos, es que ella lo es todo y más.

y como lo es todo, en ella estoy inmerso, ya es ella dueña de mi carne, de mi alma, de mi todo...

y que más da si mi todo es ella, no más.