Mmm…
[Ronald Hernández Morales]
Mara Miroslava Márquez me miraba, me miraba muy melancólicamente mientras me mostraba mis mismas misivas melosas mandadas. Medrosamente, Mara me manifestó muchas molestias: “Monito, me mortifica mucho mencionarlo, mas me mortificaría mucho más mentirte”, me miró maduramente, “Malgastamos medio mes, malgastamos minutos, muchos minutos malogrados” musitó marcadamente. Mi mente momentáneamente merodeó mis memorias mezcladas mientras mi minúsculo mundo maravilloso moría morosamente. ¡Maldición! Mi mujer, mi mirasol, mi milagrosa mestiza, mi musa magnífica, mi mesalina mundana, mi meretriz matutina, ¡Mi Mara Miroslava!
Me movió, me movió mucho mirarla marcharse, mas mi mente me mandaba: “Muchas más memorias malogradas mantienes, mereces más”.
Mayo me muestra mis mutiladas memorias, me molesta mordazmente, me muestra mis magulladuras, me mortifica monstruosamente mofándose mientras medito mis miroslávicas memorias. Mmm… Mayo, mucho más moderado, mas menos memorable. |