Vienen vientos mejores
Se avecinan nubarrones en el horizonte
Pero vienen tiempos mejores

Los cuentos de las lechuzas
No llegaron a mis oídos
Caminamos pensativos
Ansiosos, casi furtivos
Sin angustias, sin prisa
Consolando a un cocodrilo
Escondamos las vencidas
Fuerzas de nuestro olvido

Que la tierra caiga en llanto
Que se escuchen sus quejidos
Que gobiernen desvaríos
Los volcanes de aquel río

De mi pueblo ahora perdido
Ya no asoman las pestañas
Los colores se han perdido
Se han perdido los delirios
De la gente que ha olvidado
Que Sus cantos le acompañan

Caminando de la mano
Azucenas en los mares
Plantemos en un desierto
Para que nadie se olvide
Que las voces son del pueblo
Sin colores, ni fronteras
Pajaros en la cabeza

Nubarrones homicidas
Anunciantes de tormenta
Que quedan enmudecidas
Al tocar las campanillas
De las horcas del infierno

Los saqueos de gobiernos
Que gritando, promulgando
Se han callado con el trueno
De las voces de los muertos

que teman los opresores
Pues vienen los oprimidos
Aprendiendo que el que gime
Puede tronar un quejido
y matar a un desconocido
que se ha creído más hijo
que los hijos de la misma tierra
tierra, bendita, serena
que lo ha parido!